Cada uno contó lo más sobresaliente de deportes, del incendio que acecha a Garajonay, de esto y aquello y entonces la maestra preguntó si alguien sabía algo del Tíbet.
Como hay gente a la que le encanta la geografía, nos dijeron algunas cosas y luego ella nos contó algo más sobre ese país, sobre los problemas de su invasión, del Dalai Lama, del exilio, de las manifestaciones de estas semanas a favor del diálogo con China para lograr la libertad en Tíbet y, para concluir, ella dijo que era a modo de metáfora, nos leyó un cuento tibetano adaptado para personas con dificultades en lectura por Ramón Girona y con ilustraciones de Lluïsot.
Como ya sabemos qué es eso de una metáfora, empezamos a escuchar con atención para ver qué era lo que se escondía debajo de las palabras de la historia. Y había mucho en qué pensar:falta de libertad, prisión, robo de un tesoro, desolación, infelicidad, esfuerzo, tesón, devolución, belleza...
¡Claro que entendimos! Nadie puede ser feliz si le quitan la libertad hasta que, cueste lo que cueste, los valientes sean capaces de lograr que se la devuelvan. Entonces todo puede volver a cobrar vida y color. ¡Todos los colores!
"El pájaro de la felicidad" es el título de ese libro y está editado en Los libros del zorro rojo.