
Con esta mañana caminando por las galerías, subiendo las rampas y escuchando latir el corazón de cada rincón de la explotación minera, queremos aprender a no olvidar a aquellos niños que, a nuestra edad, ya eran "guajes" y ayudaban a los picadores profesionales en sus duras tareas diarias dejando a un lado, a muy temprana edad, la escuela y volviéndose adultos de manera obligatoria.
Todos podemos vivir estas mismas sensaciones leyendo un estupendo libro tutulado"Los niños de la mina" de Fabian GRÉGORE editado en Corimbo que, aunque contiene algunos fallos en la documentación, nos deja intacta la emoción de conocer de cerca historias parecidas contadas por nuestros mayores.